jueves, 14 de diciembre de 2006

Tutorial para disfrutar de “la noche”


Me estoy dando cuenta de una cosa, la resaca me inspira... La mayoría de las cosas que he escrito han sido después de salir por la noche, y quizá sean las que más me gustan. Hoy no es una excepción, así que vamos a echar la jodiura que tengo en la cabeza.

Este manual utiliza ejemplos de Badajoz, pero puede ser aplicado en cualquier otro lugar. Está indicado para gente que está harta de hacer el borrego como siempre en los mismos lugares de siempre. Si eres feliz haciendo botellón, y yendo luego a los sucedáneos de discotecas habituales, no sigas leyendo.

La primera indicación es cambiar el paradigma de las intenciones. Sal para estar con tus amigos. Disfruta de ellos, agárrate a lo que tienes seguro. No salgas pensando en copular por ahí, si luego no te vas a acercar a ninguna mujer. Conseguir hacer el amor (nunca follar, que eso está mu feo) es algo completamente impredecible, y si apoyas en eso tu deleite y fracasas, la noche será una decepción. Si no tienes amigos, puedes salir para emborracharte, aunque yo recomiendo la primera opción, más sana y productiva.

Busca una excusa, celebra algo. Puede ser un aprobado, un ascenso, un aumento de sueldo, un divorcio... no es necesario que ocurra ese mismo día, puede haber pasado hace poco, o estar próximo. Mi excusa fue que mi cumpleaños era el miércoles que viene (ahora mismo es viernes 8). La excusa incluso puede ser inventada, el caso es conseguir dar un buen ánimo al ambiente.

Empieza temprano. Si sales a partir de media noche, las opciones son mucho más limitadas, en cambio a las nueve hay otras cosas de las que disfrutar, y eso no te impide ver luego las otras alternativas. Tómate un par de cañas, por ejemplo en el Pachito o cualquier otro bar similar. Si os sirven unas tapitas mucho mejor, ya que puede ser que no todos vengan cenados de casa. En este momento el gran grupo está dividido en otros grupos de dos o tres elementos cada uno. Cada grupo hablará de temas concretos en los que solo estarán interesados sus miembros. Aquí es donde el individuo deja de serlo, para empezar a formar parte del todo.

Cambia de local, vete a tomar unos chupitos, por ejemplo al Guiñol. Habrá a quien le gusten más, habrá a quien le gusten menos, habrá quien los ame y quien los odie, pero hay una cosa innegable, la capacidad de unión. Tomarte un chupito no es llevarse a la boca un vaso pequeño y tragar, para tomar un chupito es necesaria una parafernalia, un ritual. Es imprescindible chocar los vasos y brindar por algo, por ejemplo por la excusa propuesta, mi cumpleaños en mi caso. Por muy poco en común que tengan los participantes, es el momento en el que todos prestan atención a una sola cosa, y ponen todo su empeño para trabajar en grupo. Es la auténtica unión. Los chupitos preparados suelen tener un sabor agradable, pero si os queréis poco, podéis probar otro nivel con chupitos de tequila, o incluso absentao o Stroh. Con estos últimos el momento no os pasará desapercibido, es imposible no tener consciencia de lo que pasa cuando estás luchando por recobrar la respiración y aguantar el lagrimeo, además la cooperación está asegurada, en ningún otro momento de la noche estarás más pendiente de las caras que ponen tus amigos.

Ahora que el grupo está más unido, id otro local, pero busca alguna bebida exótica, como una caipirinha, aun no es el momento de echarse al gaznate algo que simplemente se ha volcado en un vaso, es necesaria una bebida elaborada, y a ser posible que necesite de actividad por nuestra parte, como removerla al menos. Nosotros fuimos al Malecón a tomarnos unos mojitos. A partir de ahora las conversaciones estarán más unificadas. Si se produjera algún silencio, siempre es un buen tema comentar como está tu mojito, cuantas vueltas le has dado con la pajita, o que acabas de tragar hierba buena.

De este lugar saldréis riendo, y con una buena cantidad de felicidad en el cuerpo. Ahora es el momento de tomarse una copita. Buscad un garito con clase. Nosotros fuimos a la sala Aftasí, un lugar bonito, con una Dj pinchando música, un proyector con entretenidos vídeos, algunos asientos cómodos y las copas a un precio más o menos razonable para lo que se estila por estos lares y a esas horas. Aquí hicimos algunas fotos que he colgado en mi álbum. Id ultimando las conversaciones, ya que en el próximo sitio el nivel máximo de ruido es tan bajo que no os permiten hablar, para no molestar a los vecinos y eso...

Y ahora es el momento de ir a mover el culo a los lugares más de moda, nosotros fuimos a DeClub. Seguramente sea la hora perfecta (en mi caso lo fue), pero no es difícil haberse adecuado el tiempo para llegar antes de que se llene o cuando ya esté lleno, eso queda a gusto del consumidor. Por vuestro propio bien, espero que a estas alturas de la noche tengáis ya el paladar algo atrofiado (y quemado por el alcohol), ya que hay que armarse de valor para saborear los licores que disponen estos lugares. Recuerda que el servicio es el mejor lugar para entablar amistad con gente de tu mismo sexo, además, a partir de este momento lo visitarás con una frecuencia desmesurada. Las posibilidades de estos locales son muy amplias y variadas, a mi la que más me gusta es ponerme al lado del altavoz, te entra un cosquilleo.... además suele durar varias horas, es como un orgasmo prolongado. Este es el terreno del zorro, en el que gracias al alcohol y a la música y las luces "hipnotizantes", es más fácil pillar cacho.

Ya queda poco, es posible que estés cansado y quieras irte a casa, pero es también posible que quieras tomarte la última, así que si estás en Badajoz puedes ir a Praia. Praia es un local de esos en los que deberías llevar gafas de buzo, con su correspondiente bombona de oxígeno, seguro que todos conocéis lugares de esta clase. Prepárate para escuchar música electrónica a un nivel sonoro que se ríe del umbral del dolor, y disfruta de ella.

Y ahora tómate tu copa y vete a casa, como mucho desayuna si encuentras algún bar que esté abierto. Intenta no acostarte sin llenarte el estómago, a menos que quieras retorcerte en tu cama al día siguiente. Desde luego, esto no evitará la resaca, pero sí que la aliviara en un alto grado, aunque dejaremos este tema para otro artículo.

Entre las consecuencias se encuentra el exponencial crecimiento negativo de tus ahorros. Te habrás bebido tu dinero, pero no intentes recuperarlo cuando lo orines. Consuélate matizando la realidad con ideas como que no te has gastado el dinero en alcohol, sino en vivir experiencias que es lo más sabio en lo que el ser humano puede invertir tiempo, dinero y esfuerzo.

Es posible que alguien haya echado en falta algo tan difundido como hacer botellón, y no ha sido por descuido. Hace algunos años, hubiera incluido la idea indudablemente como opción, pero los tiempos cambian. Cuando era mozo, el botellón era un lugar de encuentro, un lugar de relación interpersonal. Ahí hacías amigos, convivías con los que tenías y conocías gente nueva. Sin embargo, ahora a parte de empezar a ser de los que mandan por la jerarquía que rige la edad, los conocidos hacen su vida de una forma desconocida. Hoy en día no suelo encontrarme con más de 4 o 5 conocidos, y si a eso le sumas las bajas temperaturas y la falta que le hace a más de uno que su cara impacte contra mi mano... pues prefieres ahorrar un poco e irte a algún local.

Bueno chavales, tened cuidadito por ahí, y espero que os toméis alguna copa a mi salud.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Mucho blabla y muchas guías de cómo pasartelo bien pero luego nunca quieres ir de fiesta conmigo!!! asi que yo soy un poco como los cientificistas antiguos que defendían el sistema de verificación...pues yo lo mismo, hasta que no me lo demuestres no lo consideraré verdad!!! ajajajja

Anónimo dijo...

Veo que gozas de una buena solvencia económica, para tí dejó de existir eso del botellón, eres un tio con clase... con clase y con pelas, qué coño!! A no ser que a la mañana siguiente sí que hagas pipí (como dice uno que yo conozco...) en forma de billetazos de 50 euros por lo menos! Ya me contarás el secreto ;)
Sabes qué? Tengo una crisis

Por cierto... me has matao con lo del altavoz...
... sencillamente no tengo palabras...

Say you, say me

p.d. Sólo me quedan 24 horas y pico para ir a la cena al Boca a Boca... bufé libree!! No te flipes, no creo que me pongan solomillo con fuá... no todos somos tan afortunados como tú y tu paladar!

Anónimo dijo...

Doy fe