Como seducir a una mujer

Estoy seguro de que este artículo me subirá varios peldaños en la escalera de Google. De guarros está lleno el mundo, y todos se reúnen en internet.

A más de uno (y de una) se le ha pasado por la cabeza como mejorar sus dotes de seducción. Pues bien, cumpliendo con la labor deformativa de este blog comentaré algunos de los elementos necesarios para iniciar el camino a la cópula.

En primer lugar, atendamos a nuestras posibilidades. En concreto, a lo que podemos hacer según la situación. Para el que no haya visto Barrio Sésamo, para estar cerca de alguien, primero hay que estar lejos. Estar lejos tiene varios inconvenientes, la física bien sabe que en tal caso no hay ningún contacto carnal. Así que procedamos a crear otro tipo de vínculo. El ser humano tiene muchas capacidades, y una de ellas es la de dar voces. Además, la gran mayoría es capaz de articular los sonidos de tal forma que pueden evocar sensaciones e ideas en otras personas. Bien, aquí presentamos al piropo.

A toda mujer le gusta que se fijen en ella y que se aborden sus cualidades. Esto es una realidad salvo en contadas ocasiones, tales como que el emisor le apunte con una pistola, o que huela mal. En todos los demás casos, ella se sentirá agradecida. Como lo que entra por la vista no es amor, si no lascivia en estado puro, utilizaremos el vocabulario adecuado. La siguiente lisonja cumple las características necesarias para ser tenido muy en cuenta: "Guapa, te lo comía hasta meao". Es importante no decir "meado" puesto que un exceso de refinamiento podría distraer la atención del mensaje, además, no queremos parecer cursis. Aunque los estudios realizados han sido poco concluyentes, hay una gran tendencia a dudar de su eficacia, aun sin ser esto argumentado. Si yo fuera mujer y me dijeran eso con un ramo de flores, caería rendida a los pies de cualquiera.

Como me estoy empezando a poner romanticón, vamos a poner otra lindeza, más orientada a las relaciones estables: "Hija, lo tienes to pa estar conmigo". El "hija" es el elemento esencial que le da realidad a la oración, sin esa palabra, el resto carecería de emoción y no sería más que una frase hecha, dicha por decir. En contra de la primera impresión, con esto no se ensalza ninguna virtud, como mucho, si ella es un poco fea y/o tonta, podríamos poner de manifiesto cuan bajo está el listón, y los pocos requisitos a exigir.

Una vez superada la prueba verbal, es el momento de dejarle paso al tacto. Todo el mundo sabe que las caricias son agradables, los perros mueven el rabo por cosas como esta, así que a la primera ocasión es bueno tocarle el culo a la chica. Da igual que aún no sepas su nombre, esto le dará confianza y seguridad. Si no, hay una cosa segura, y es que tendrá en cuenta tu presencia durante mucho tiempo. Notarás que lo has hecho bien, cuando ella te mire de una forma diferente. La expresión de su cara reflejará sus sentimientos. En otro contexto, se podría pensar que está enfadada, pero si no sonríe es que la cosa va bien. Si te enseña su dedo corazón, enhorabuena, ¡la tienes en el bote!

Si has seguido bien todos los pasos, seguramente ya tendrás en tu poder su teléfono e incluso habrás concretado la fecha de la siguiente cita. Ahora le toca el turno a tu apariencia. Lo más importante es que no hagas nada especial, ella quiere verte tal y como eres. Ponte el chándal y los mismos calzoncillos de todos los días. Como perfume, no hay nada mejor que el propio olor corporal, así que haz algo de ejercicio antes de salir de casa. La mejor manera de crear un vínculo es mostrándote en toda tu magnitud, así que lo más recomendable es llevar solo una camiseta interior (sin mangas) o una camisa completamente desabrochada (con el pantalón del chándal, claro). Esto es elegancia, cosa fina. Si es invierno mejor aún, podrás demostrar que eres un hombre.

Ya está todo casi listo, solo falta definir las pautas para la conversación. Aquí podemos diferenciar dos partes importantes. En primer lugar el tema. En la primera cita lo más importante es hablar de follar. Comienza preguntándole la talla de sujetador que usa (no sin antes haberle aclarado la medida de tu miembro, que hay que ser cortés) y después pregúntale si tiene hijos, si es virgen, o si tiene algún tipo de enfermedad venérea. No le preguntes si toma la píldora anticonceptiva, te responderá que sí. A estas alturas y tras seguir todos los pasos anteriores ella estará locamente enamorada de ti, habrá visto el saber estar que posees y querrá pillarte de cualquier forma, incluso de penalti. El otro apartado de vital importancia son las formas. Ráscate los huevos de vez en cuando. Esto jamás podría hacerse de forma disimulada, pero pon cara de que crees que nadie se está dando cuenta. Ponte un palillo en la boca, esto dota al que lo lleva de una gran sensualidad. Si eres capaz de hablar sin que se caiga ella verá en ti al macho que necesita. Como hemos dicho antes, queremos naturalidad, así que eructa de vez en cuando, y si tienes oportunidad, hazlo mirándola a la cara a corta distancia, harás que sus sentidos se estremezcan.

Finalmente, si estáis en un bar/restaurante/chiringuito, insiste en que pague ella, así quedará muy claro que no eres un machista. Luego dile que no recoja el cambio, incluso que deje propina, que vea que eres generoso. Este último paso es muy sencillo y barato (para ti).

Ya tenéis todos los conocimientos necesario para ser unos grandes seductores. Ahora que sabéis el secreto, debéis utilizarlo con responsabilidad, y solo para hacer el bien.

P.D. Podéis compartir aquí vuestras experiencias. Contadnos vuestros triunfos.